"Soy el intendente de todos los deroenses, de los que me votaron y de los que no".
— Alejandro Acerbo.
El título obedece a la respuesta a una frase del diputado provincial Luis Oliver en el lanzamiento de la campaña de Esteban Hernando allá por julio, "no es tiempo de banqueros", dijo el legislador. Las elecciones primarias y posteriormente las generales demostraron que sí, que el hombre del Banco Nación no sólo estaba preparado para gobernar su ciudad sino también para ganar las elecciones con un mayoritario apoyo de sus vecinos.
La ceremonia de asunción se realizó en la Sala San Martín, lindera al municipio. Con la locución de Fabián Sierra, primero se llevó adelante la sesión preparatoria del Consejo Escolar, en realidad sólo se escucharon los discursos de despedida de los consejeros salientes y la entrega de diplomas, porque las autoridades del cuerpo ya se habían votado con antelación.
Después fue el turno de la preparatoria del Concejo Deliberante, con la Sala San Martín colmada. La presidió el concejal entrante de mayor edad, el oficialista Roberto Serra. Enseguida se puso a consideración la votación del nuevo presidente del Cuerpo y ahí Patricia Leiva tomó el micrófono y dijo que como el Frente para la Victoria había ganado las elecciones, correspondía que pusiera a un concejal de ese bloque en dicho sitial. Enseguida se eligió, por unanimidad, a la odontóloga Vivian Debali.
Luego se puso a consideración el vicepresidente primero. Patricia Leiva se autoproclamó mientras que Hernán Jaurena, del Frente para la Victoria, propuso a Sergio Córdoba. Leiva protestó, pensó que tras el gesto de haber cedido la presidencia sin puja le iban a otorgar la vicepresidencia primera pero no, el hombre del Frente Renovador se proclamó por mayoría.
La vicepresidencia segunda no tuvo postulantes de Cambiemos, que molestos por no tener la vicepresidencia primaria dejaron que el Frente para la Victoria propusiera al ocupante de ese cargo. Jonás Doncel tomó el micrófono y propuso a Miriam González, que fue electa automáticamente.
La secretaría del Concejo Deliberante quedó para Cecilia Guidobono, que continúa en el cargo. Y las sesiones se fijaron para los primeros y terceros miércoles de cada mes, a las 20 horas. Terminada la preparatoria la flamante presidenta del Concejo, Debali, pidió a los presidentes de los tres bloques que la acompañaran a buscar al intendente para que jurara.
Cuando Acerbo apareció en el escenario estalló la tribuna, incluso los más jóvenes hasta entonaron alguna de las canciones de campaña. El contador juró "por mi pueblo de Daireaux" ante la presidenta del HCD y luego se sentó a dar un discurso que duró unos 24 minutos.
De las principales frases de Acerbo destacó: "Soy el intendente de todos los deroenses, de los que me votaron y de los que no, y debo gobernar para todos ellos". Alejandro habló poco de la herencia recibida por Hernando, habló de unos 17 millones de pesos de déficit, "pero estamos revisando y puede que sea mayor", manifestó.
El mandatario apuesta a la industrialización de su ciudad, para ello anunció que el jueves de la semana entrante viajará con un grupo de intendentes peronistas a reunirse con la gobernadora María Eugenia Vidal, "y en su momento también lo iremos a ver al presidente de la Nación", agregó.
Fue un discurso corto pero concreto, que dejó entrever la obsesividad de Acerbo por conocer todo: "Les vivo preguntando a los empleados municipales, porque quiero saber, no lo sé todo, entonces pregunto para aprender".
Después de 42 años Daireaux volvió a tener un intendente justicialista. En la tribuna, junto a otros ex intendentes, Luis Oliver veía con sus propios ojos que aquella frase que acuñó en el lanzamiento de campaña de Hernando se le volvió en contra, los deroenses eligieron que sea "tiempo de banqueros", tiempos de Alejandro Acerbo, flamante intendente que juró esta noche.
El intendente, al igual que varios mandatarios de la región, estuvieron junto al gobernador en la inauguración de la obra de gas de esa localidad bonaerense.