Rodríguez Larreta celebró que la Ciudad tenga su propia policía

La Legislatura porteña votó la Ley de Seguridad Pública Integral que crea la nueva fuerza.

“Es un día histórico que venimos soñando hace mucho tiempo”.

— Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno porteño.

El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, aseguró este jueves que los porteños viven “un día histórico” por la sanción en la Legislatura de la nueva Ley de Seguridad Pública Integral, que entre otras cosas, oficializa la creación de la nueva Policía de la Ciudad.

En ese sentido, afirmó que a partir de la puesta en marcha de la nueva fuerza, prevista según la norma para el 1º de enero próximo, están “todas las condiciones dadas para trabajar en mejorar la seguridad de los vecinos”.

“Este es un día histórico que venimos soñando hace mucho tiempo. Hoy la Ciudad tiene su propia Policía. Y tenemos todas las condiciones dadas para trabajar en mejorar la seguridad de los vecinos. Hoy sí podemos encarar el trabajo profundo, un trabajo que va a ser largo y va a involucrar a un gran equipo de gente”, expresó.

Durante una conferencia de prensa brindada tras la sanción de la Ley, el Jefe de Gobierno resaltó que “el primer valor de la fuerza va a ser la transparencia y la honestidad”. “Vamos a tener tolerancia cero con casos de corrupción. Y los primeros que hoy lo valoran son los propios policías”, añadió Rodríguez Larreta, quien estuvo acompañado por el ministro de Seguridad de la Ciudad, Martín Ocampo.

La Legislatura sancionó este jueves la Ley de Seguridad Pública Integral con 55 votos a favor, 3 en contra y 1 abstención. Se trata de una norma enviada por el Ejecutivo porteño que formaliza la creación de la nueva Policía de la Ciudad.

El jefe de Gobierno agradeció al presidente de la Nación, Mauricio Macri, por cumplir “el compromiso de traspasar los efectivos de la Federal que ya estaban operando en la Ciudad”.

Rodríguez Larreta destacó también el “consenso” con el que fue aprobada la nueva norma, y además de agradecer la labor de los legisladores del PRO, resaltó el trabajo de “gran parte de la oposición, que colaboró, enriqueció la ley, mostrando que la seguridad en la Ciudad es una verdadera política de Estado”.

La nueva fuerza, integrada por unos 25 mil hombres, será un cuerpo de seguridad que se distinguirá por su formación, equipamiento y cercanía, y su conformación cumplirá una de las prioridades estipuladas desde el inicio de la gestión. Tanto los nuevos cadetes como los efectivos transferidos se formarán y entrenarán en el ISSP, un centro académico ubicado en el Bajo Flores, que es modelo de formación en Latinoamérica.

Por su parte, Ocampo destacó también que la nueva ley prevé la intervención preventiva de la fuerza porteña de seguridad “con las limitaciones propias que impone la Constitución”.

“Se crea un sistema de intervención policial en prevención del delito. Esto le da ciertas herramientas que en algunos ámbitos judiciales se habían discutido pero que en la ley se han plasmado en forma explícita. Tiene que ser dentro del marco de una política de seguridad, en un control poblacional o en la búsqueda de algún prófugo, por ejemplo”, explicó.

Los integrantes de la Policía Metropolitana reciben instrucción en Derechos Humanos, legislación porteña y aplicación de la Constitución Nacional y la de la Ciudad, así como métodos específicos para actuar contra la violencia de género. Todas las materias son dictadas por profesores universitarios, jueces y fiscales. Para equiparar ambas fuerzas se realizaron entrenamientos a los efectivos transferidos de la Policía Federal y ya pasaron más de 3 mil agentes en lo que va del año.

En cuanto al equipamiento, fueron comprados 300 patrulleros y 40 pickups, todos blindados y equipados con alta tecnología, además de la incorporación de 300 motos, 60 cuatriciclos y 40 autos eléctricos. También se aprobó la compra de 20.000 chalecos antibalas, nuevas armas reglamentarias y uniformes para toda la fuerza.

Además, con el objetivo de contar con una fuerza presente, de cercanía y con conocimiento de cada barrio, ya se inició el proceso para reemplazar a los policías que hacen tareas administrativas en las comisarías con civiles entrenados para esos fines.