Marcos Pisano fue con quien más veces se juntó Griselda. Antes de las elecciones dijo que le gustaba cómo estaba trabajando Bucca.
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Griselda Iglesias es, por lejos, quien mejor manejó la Secretaría de Acción Social en los últimos años. Cuando Juan Carlos Simón se fue como senador, fue desplazada por José Gabriel Erreca y la trabajadora social emigró a La Plata para trabajar con el entonces legislador, quien había sido intendente durante 14 años, en los cuales lo acompañó siempre.
Cumplido el mandato de Simón en 2013, Griselda comenzó a alejarse de la arena política, convencida de que su ciclo estaba terminado y que era tiempo de devolverle a su familia todo el tiempo que le había quitado por dedicarse a la función pública de manera exclusiva.
Muchos desmemoriados la asociaron siempre con el simonismo y con la Unión Cívica Radical; aunque cabe resaltar que Griselda ingresó al municpio por concurso y durante la intendencia del justicialista Juan Carlos Reina. Después Simón la mantuvo en el cargo, la pasó de directora a secretaria y el resto es historia sabida.
Desde 2013 a la fecha, hubo muchos acercamientos de parte de hombre allegados al intendente Eduardo Bucca para convencerla de que trabajara en la gestión y diera una mano desde su experiencia y conocimiento de la problemática social local. Ella siempre dijo que no, pidió tiempo para estudiarlo; pero a la vez se iba alejando de los lugares políticos que siempre frecuentó,
Previo a las pasadas elecciones de 2015 dijo estar de acuerdo con la política que llevaba adelante Bali Bucca, con lo que se ganó varios llamados telefónicos y mensajitos que lógicamente no eran para felicitarla. Quien más cerca estuvo en las conversaciones con Griselda fue Marcos Pisano, el hoy intendente interino hasta que venza la licencia de Bucca.
Varios fueron los comentarios respecto del futuro de Griselda. Muchos la veían regresando al lugar que hoy ocupa Oscar Ibáñez, otros decían que le habían propuesto ir a la Comisión de la Vivienda, lo cierto es que ahora se publican fotos de Griselda junto a Pisano y a Ibáñez recorriendo el CEPLA, ese gigante que se erige detrás del Barrio Vivanco.
Posiblemente haya ido para dar su visión como trabajadora social y por la experiencia que tiene de haber trabajado el tema adicciones con muchos jóvenes. Lo cierto es que no es casual que después de todo lo que se habló, Griselda se muestre de esta manera. Si se va a sumar al Ejecutivo de Bucca es una incógnita aún, lo que sí es sabido es que es una mujer que todavía tiene mucho para aportar y que es un desperdicio que no se la tenga en cuenta.
El intendente y el senador provincial estuvieron acompañados por autoriades de salud y del Hospital Capredoni.